Ante la magnitud de la transformación y la pérdida de los ecosistemas naturales y del deterioro ambiental que traen consigo, se han creado diversos instrumentos que buscan protegerlos y detener su pérdida, salvaguardando con ello su biodiversidad y especies representativas y preservando sus servicios ambientales. Destacan las áreas naturales protegidas (ANP), los humedales de la Convención Ramsar y los Programas de Pagos por Servicios Ambientales (PSA), los cuales protegen en conjunto, alrededor de 24.4 millones de hectáreas1,2 (cerca del 12.5% de la superficie nacional). La mayor parte de la superficie protegida la ocupan las ANP (alrededor del 79%), seguida por los humedales de la Convención Ramsar (14%) y las áreas de los PSA (7%).
Los estados del país con mayor superficie apoyada por los programas de pago por servicios ambientales entre 2003 y 2008, fueron Oaxaca (alrededor de 294 mil hectáreas), Durango (cerca de 173 mil), Chiapas (143 mil) y Chihuahua (poco menos de 137 mil).
1Las cifras de ANP y sitios Ramsar corresponden a septiembre y mayo de 2009, respectivamente; las de PSA a diciembre de 2008. 2Esta cifra no considera la superficie de los humedales terrestres de la Convención Ramsar incluida dentro de las ANP federales terrestres.