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Atmósfera • Calidad del aire  
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5.1.2 Monitoreo de la calidad del aire

La contaminación del aire tiene efectos negativos sobre la salud humana, se considera como un factor causal importante de padecimientos cardiovasculares, respiratorios, e incluso cáncer. En 2012, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la contaminación atmosférica causó a nivel global alrededor de 3.7 millones de muertes prematuras en ciudades y zonas rurales (WHO, 2014). En América Latina, más de 100 millones de personas están expuestas niveles elevados de contaminación (CAI, 2013) y en México algunos estudios han encontrado que el aumento en 10 partes por billón en las concentraciones de ozono ha ocasionado un incremento del 2% en las visitas a las salas de urgencia por enfermedades respiratorias (Ferrer y Escalante, 2009; ver Recuadro Efectos de la exposición a contaminantes atmosféricos sobre la salud en el Informe 2012). Sin embargo, la contaminación no sólo tiene efectos en la salud, también afecta a los ecosistemas naturales y sus especies, tanto por la deposición húmeda o seca1 de los contaminantes en el suelo y los cuerpos de agua, como por su contacto con los contaminantes transformados químicamente, como en el caso de la lluvia ácida (ver el Recuadro Lluvia ácida: causas y consecuencias en el Informe 2012).

Con el objetivo de conocer la concentración y dinámica de los contaminantes atmosféricos que permitan una mejor planeación y gestión de la calidad del aire, se han establecido en distintas zonas metropolitanas y poblaciones del país estaciones y redes de monitoreo atmosférico. Los principales contaminantes que se miden son: bióxido de azufre (SO2), monóxido de carbono (CO), bióxido de nitrógeno (NO2), ozono (O3), partículas menores a 10 y 2.5 micrómetros (PM10 y PM2.5, respectivamente), partículas suspendidas totales (PST) y plomo (Pb).

En el año 2012, 84 zonas metropolitanas y poblaciones del país contaban con equipos para la medición de contaminantes atmosféricos (Mapa 5.1.2.1). Sin embargo, aunque el esfuerzo por ampliar la cobertura del monitoreo ha sido significativa, aún existen núcleos de población importantes que no cuentan con equipos instalados. Actualmente más de 30 localidades en el país con más de cien mil habitantes no tienen monitoreo de la calidad del aire. Al problema de la cobertura debe sumarse el de la calidad de la información: de acuerdo con el último almanaque de datos y tendencias de la calidad del aire, en el 2009 sólo 20 ciudades disponían de información suficiente para conocer la calidad del aire en al menos tres años consecutivos, nueve localidades para cinco años y únicamente las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara y el Valle de México habían generado información de manera constante desde hace al menos quince años (INE, Semarnat, 2011).

 

 
Mapa 5.1.2.1 Zonas metropolitanas o poblaciones con monitoreo de la calidad del aire, 2012
 
     
 

La red de monitoreo más completa y antigua se localiza en la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), que cuenta con 26 estaciones de monitoreo automático (EMA), 2 estaciones de monitoreo manuales, 8 mixtas y 2 unidades móviles. Las estaciones de monitoreo registran, entre otras variables, las concentraciones de O3, CO, SO2, NO2, CO2, PM10 y PM2.5, considerados como contaminantes criterio y de los cuales se tiene más información acerca de sus efectos sobre la salud.

Otras ciudades que cuentan con redes de monitoreo importantes y con registros de mediados de los años noventa son las zonas metropolitanas de Guadalajara, Monterrey, Toluca y ciudades fronterizas como Tijuana, Mexicali y Ciudad Juárez. Algunas ciudades se concentran en evaluar alguno o varios contaminantes de importancia local, como es el caso de Apizaco y Huamantla en Tlaxcala, San Miguel de Allende en Guanajuato, Ajacuba y Tepetitlán en Hidalgo, Guaymas y Navojoa en Sonora, entre otros, que se enfocan en la medición de las partículas suspendidas2.

 

Notas:

1 La deposición húmeda se refiere a la caída de contaminantes a través de lluvia, nieve, aguanieve o niebla. La deposición seca ocurre cuando los gases y partículas son arrastrados por el viento (INECC, 2014).

2 La lista completa de las estaciones de monitoreo y los contaminantes registrados se pueden consultar en la Base de Datos Estadísticos del Sistema Nacional de Información Ambiental y de Recursos Naturales (SNIARN) en la dirección electrónica: http://www.semarnat.gob.mx/temas/estadisticas-ambientales.

 

Referencias

CAI. La Calidad del Aire en América Latina: Una Visión Panorámica. 2013.

Ferrer C. J. y R. Escalante. Contaminación atmosférica y efectos sobre la salud en la Zona Metropolitana del Vale de México. Economía Informa 360: 22-39. 2009.

GODF. Decreto por el que se expide el Programa para Contingencias Ambientales Atmosféricas en el Distrito Federal. Gaceta Oficial del Distrito Federal. México (9 de agosto) 2012.

INE, Semarnat. Cuarto almanaque de datos y tendencias de la calidad del aire en 20 ciudades mexicanas (2000-2009). México. 2011.

INECC, Semarnat. Dirección General del Centro Nacional de Investigación y Capacitación Ambiental. México. 2013.

INECC. Lluvia ácida. México. 2014. Disponible en: http://www.inecc.gob.mx/calaire-informacion-basica/554-calaire-lluvia-acida. Fecha de consulta: agosto de 2014.

SMA. Activación del Programa de Contingencias Ambientales Atmosféricas en la ZMVM. Fase de Precontingencia. México 2014a. Disponible en:
http://www.calidadaire.df.gob.mx/calidadaire/index.php?opcion=2&opcioninfoproductos=27. Fecha de consulta: julio de 2014.

SMA. Activación del Programa de Contingencias Ambientales Atmosféricas (PCAA) en la ZMVM Contingencias (Fase I y Fase II). México 2014b. Disponible en: http://www.calidadaire.df.gob.mx/calidadaire/index.php?opcion=2&opcioninfoproductos=27. Fecha de consulta: julio de 2014.

WHO. Ambient (outdoor) air quality and health. 2014. Disponible en: http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs313/en/. Fecha de consulta: julio de 2014.

 

 

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