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Indicadores de respuesta

Capacidad instalada para el manejo de residuos peligrosos

Reducir los volúmenes de generación de residuos peligrosos que se liberan al suelo, aire y agua es el objetivo principal de los programas de prevención de la contaminación, los cuales procuran evitar los posibles daños al medio ambiente y la salud humana que podrían ocurrir por su manejo inadecuado (EPA y Sedesol, 1993). Existen varias alternativas para la reducción del volumen de residuos peligrosos. En primer lugar está la reducción y eliminación de residuos por el cambio de las tecnologías de producción. También existen estrategias de reducción de residuos peligrosos por medio de su reciclaje y reuso, lo que maximiza su utilización antes de su tratamiento y disposición final. Finalmente, se trabaja en el tratamiento de los residuos para reducir su peligrosidad y volumen. Estas estrategias frecuentemente reducen los costos de disposición y tratamiento, en lo cual la industria generadora podría encontrar oportunidades para reducir sus costos de operación (Masters, 1991). Aun cuando el mejor indicador de respuesta en esta materia es el volumen de residuos peligrosos manejados adecuadamente, actualmente no se cuenta con la información suficiente para incluirlo como indicador. En su lugar se propone el indicador capacidad instalada para el manejo de residuos peligrosos por tipo, que incluye su reuso, reciclaje, tratamiento e incineración como una medida que ofrece una idea del potencial de manejo de este tipo de residuos. La OCDE y la UNCDS no proponen este indicador dentro de sus conjuntos de indicadores ambientales, sino que se orientan a indicadores como gasto en el manejo de residuos (UNCSD, 1996) y tasas de reciclaje (OCDE, 1998).

 

Remediación de sitios contaminados con residuos peligrosos

La remediación de sitios se refiere a las medidas a las que se someten los suelos y sitios contaminados para eliminar o reducir la presencia de los contaminantes. Dicho proceso puede resultar difícil y significar costos muy elevados (Semarnat-GTZ, 2002). Por ejemplo, en Love Canal, Nueva York, se destinaron 500 millones de dólares para la limpieza de un área contaminada por compuestos orgánicos, la cual tardó quince años en concluirse (EPA, 2004). La tecnología aplicada depende del tipo y volumen de los residuos. En México, los costos aproximados para la limpieza de 15 sitios en 2002, variaron desde los 30 mil hasta los 312 mil 411 millones de pesos (Semarnat-Profepa, 2000). Ante esta problemática, la Semarnat desarrolla acciones con el objetivo de identificar e inventariar en el territorio nacional los sitios contaminados con residuos peligrosos, evaluando los daños ocasionados al ambiente y estableciendo las prioridades de atención. Lo anterior le permite conocer en detalle la problemática de los sitios y emitir propuestas para su rehabilitación (Semarnat-SGPA, 2003). De esta manera, el indicador de sitios identificados con residuos peligrosos remediados o en proceso de remediación se considera como un indicador de la respuesta concreta del sector público y privado en esta materia.

 

Actividades de inspección y vigilancia en materia de residuos peligrosos

Mediante los programas de inspección y vigilancia, la Profepa verifica y promueve el cumplimiento de la normatividad en materia de generación, transporte, tratamiento y disposición o confinamiento de residuos peligrosos (Semarnat-Profepa, 2004). Por medio de las visitas de inspección se identifican irregularidades, se dictan medidas correctivas y se imponen clausuras en caso de presentarse irregularidades graves que signifiquen un riesgo inminente de desequilibrio ecológico, daño grave a los recursos naturales y contaminación con repercusiones peligrosas para los ecosistemas o la salud pública. El indicador cumplimiento de la normatividad en materia de residuos peligrosos muestra el resultado de las visitas de inspección, lo que refleja la respuesta que los generadores de residuos peligrosos ofrecen desde el punto de vista del cumplimiento de la normatividad en la materia.

 

Auditorías ambientales

Las auditorías ambientales implican acuerdos voluntarios entre las empresas y las autoridades que permiten la revisión de aspectos no regulados por la normatividad, a fin de lograr una gestión integral de las empresas. Incluyen la evaluación de la contaminación del agua, aire y suelo por residuos peligrosos y no peligrosos, así como aspectos de riesgo, higiene y seguridad industrial. Actualmente este instrumento se utiliza rutinariamente en diversos países como Canadá, Estados Unidos, Japón, Australia y el Reino Unido. La aplicación de las auditorías ambientales ha producido dos resultados importantes en materia de residuos peligrosos: la disminución de su generación y la identificación de suelos contaminados (Semarnat y GTZ, 2002; NEC, 2004). En México, la Profepa puso en marcha en 1992 el Programa Nacional de Auditorías Ambientales, en el que se ha registrado a empresas privadas y paraestatales de alto riesgo para posteriormente otorgarles Certificados de Industria Limpia. El indicador auditorías ambientales denota el interés gubernamental y empresarial en materia del manejo adecuado de residuos peligrosos y otros aspectos ambientales.