Atmósfera - calidad del aire


Indicadores de estado


Concentraciones de contaminantes

Cuando los contaminantes como el monóxido de carbono, el bióxido de nitrógeno, las PM2.5, el bióxido de azufre y el ozono se presentan en elevadas concentraciones o por periodos prolongados, pueden provocar daños sobre la salud de las poblaciones expuestas a ellos (WB, 1998, 2002; Lacasaña-Navarro et al., 1999; ATSDR, 2002; Environment Canada, 2008). Entre los daños a la salud se encuentran la irritación e infección de ojos, nariz, garganta y pulmones; la exacerbación del asma, el deterioro de la funcionalidad pulmonar, la inhibición de la capacidad para transportar sangre y el incremento de morbilidad en niños menores de cinco años y población susceptible (Semarnat-INE, 2003; WB, 2003).

Para proteger la salud humana, los gobiernos en muchos países del mundo controlan la concentración de contaminantes atmosféricos utilizando diversas herramientas normativas. En México se desarrollaron normas para cada contaminante que establecen los criterios para evaluar la calidad del aire mediante la definición de un valor límite de su concentración. En general las normas de calidad de aire se establecen con base en los resultados de estudios toxicológicos y epidemiológicos que evalúan la relación entre la exposición a un contaminante y sus efectos en la salud. En nuestro país, debido principalmente a la falta de recursos para realizar los estudios mencionados, así como a la gravedad del problema a principios de los años noventa, las normas de la calidad del aire mexicanas tuvieron como base la revisión de normas establecidas por la Organización Mundial de la Salud y por la Agencia Ambiental de los Estados Unidos y no estudios particulares sobre la población de México. (Semarnat, 2009; INE-Semarnat, 2007a).

Para conocer la concentración de contaminantes, se han establecido estaciones y redes de monitoreo atmosférico. Actualmente existen registros de contaminantes atmosféricos en 53 zonas metropolitanas y poblaciones del país (Semarnat, 2009). La medición directa de la concentración de estos contaminantes provee información más precisa para evaluar la calidad del aire. De hecho, las normas sobre los límites permisibles de concentración están definidas con base en estudios de los impactos sobre la salud dependiendo de la concentración y el tiempo de exposición a cada contaminante. En este sentido, se compara la concentración diaria (promedios de 24 horas para PM10 y SO2) y las concentraciones máximas diarias (valor máximo diario para CO y NO2 y máximo diario de los promedios móviles de 8 horas para O3) con el límite establecido en las normas de calidad del aire (INE-Semarnat, 2007a).

Para dar seguimiento a la tendencia anual de la calidad del aire, en esta publicación se eligió presentar los promedios anuales de dichas concentraciones. El indicador promedio anual de las concentraciones de contaminantes criterio y días en los que se excede la norma refleja las tendencias de la calidad del aire y es un medio para evaluar el desempeño de las políticas aplicadas. El indicador se presenta por separado para seis contaminantes: monóxido de carbono, bióxido de nitrógeno, partículas menores a 10 micrómetros, bióxido de azufre, ozono y partículas menores a 2.5 micrómetros. Esto permite mostrar los niveles a los que están expuestas las poblaciones de las zonas metropolitanas, así como el grado de cumplimiento de la respectiva norma. Este indicador es propuesto por la OECD, Environment Canada, EPA y la iniciativa sobre Indicadores de Desarrollo Sustentable en México (OECD, 2005; INEGI y Semarnap-INE, 2000; EPA, 2003; Environment Canada, 2008).