Promoción de la eficiencia energética


La Comisión Federal de Electricidad (CFE) inició los primeros programas de uso eficiente de la energía en México. En 1980 creó el Programa Nacional del Uso Racional de la Energía Eléctrica, con el objetivo de difundir información sobre ahorro de energía a los usuarios, convirtiéndose en el primer programa de eficiencia energética que tuvo el país.

Los programas y acciones que se han desarrollado desde entonces han buscado el mayor impacto de ahorro a través del cambio de hábitos y mejores prácticas, el uso de equipos y sistemas con los mayores niveles de eficiencia y, finalmente, el aprovechamiento óptimo de la infraestructura y materiales relacionados con la energía. Desde esta perspectiva, las instituciones dedicadas a la eficiencia energética en México han coordinado sus esfuerzos en tres líneas generales:

i) La normalización de equipos, productos y sistemas consumidores de energía para asegurar que los que entran al mercado lo hagan con los mayores niveles de eficiencia energética.

ii) Los programas de apoyo a los usuarios finales de energía para promover la sustitución de equipos y sistemas de baja eficiencia por los de mejor desempeño energético.

iii) Los programas de información y educación a diversos conjuntos de usuarios para orientarlos hacia las mejores prácticas en el uso de la energía.


Programa de normalización en eficiencia energética

La normalización en eficiencia energética ha sido la política pública costo-beneficio más exitosa en México. Consiste en especificaciones técnicas dirigidas a limitar el consumo de energía en equipos, aparatos o sistemas comercializados en el país, además de las edificaciones, a través del diseño adecuado de su envolvente térmica. La emisión de Normas Oficiales Mexicanas de Eficiencia Energética (NOM-ENER) se fundamenta en la Ley Federal sobre Metrología y Normalización, que actualmente sigue siendo una política implementada por la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE) que elabora, revisa y publica dichas especificaciones.

El desarrollo del programa de normalización ha ido acompañado por la creación de infraestructura con recursos privados, misma que es requerida para los procesos de evaluación de la conformidad realizados por laboratorios de prueba, organismos de certificación y unidades de verificación que son acreditados por la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA).

La certificación de un producto asegura que se cumpla con el consumo máximo o la eficiencia mínima que establece alguna de las NOM-ENER, y un organismo de certificación puede expedir los certificados, incluso en más de una Norma de producto. Una vez certificados, los productos deben incluir una etiqueta individual en los términos definidos por la propia Norma.


Otros programas recientes para promover medidas de eficiencia energética

i) Programa de Sustitución de Equipos Electrodomésticos para el Ahorro de Energía Eléctrica “Cambia tu viejo por uno nuevo”. Este programa fue creado por la SENER y operado por el FIDE hasta el año 2012. Su objetivo fue sustituir refrigeradores o equipos de aire acondicionado con más de 10 años de uso por equipos más eficientes. Este programa otorgó 1,8 millones de créditos a usuarios residenciales.

ii) Programa Luz Sustentable. Desarrollado conjuntamente por SENER y FIDE en el período 2009 a 2012, comprende dos fases. El objetivo del programa fue sustituir focos incandescentes por lámparas ahorradoras de forma gratuita y logró un reparto de 47,2 millones de lámparas ahorradoras.

iii) Programa Ahórrate una luz. Este programa de la SENER fue operado por el FIDE con el apoyo de Diconsa, S.A de C.V. Su objetivo fue entregar 40 millones de lámparas ahorradoras (LFCA) a los habitantes de poblaciones de menos de 100 mil habitantes para apoyar su economía familiar, disminuir su consumo y contribuir al cuidado del medio ambiente con la disminución de gases contaminantes emitidos a la atmósfera.

iv) Programa Hipoteca Verde. El INFONAVIT inició este programa en 2009 con la finalidad de otorgar créditos para comprar, construir, ampliar o remodelar una vivienda con accesorios ahorradores de luz, gas y agua como aislamientos térmicos, lámparas ahorradoras, calentadores solares y llaves ahorradoras, entre otros.

v) Programa de Mejoramiento Sustentable en Vivienda Existente. Tiene por objeto apoyar al sector residencial en la adquisición de tecnología sustentable y eficiente a fin de reducir el gasto familiar por concepto de consumo eléctrico. Las tecnologías participantes son sistemas fotovoltaicos, calentador de gas eficiente, calentadores solares, aires acondicionados y aislamiento térmico, entre otros.

vi) Proyecto Nacional de Eficiencia Energética en Alumbrado Público Municipal. Este proyecto tiene como objetivo impulsar la eficiencia energética a través de la sustitución de sistemas ineficientes de alumbrado público municipal, contribuyendo así a promover la reducción en el consumo de energía eléctrica, la implementación de tecnologías más eficientes y asegura el cumplimiento de las Normas Oficiales Mexicanas correspondientes a los sistemas y productos de alumbrado público.

vii) Programa Nacional de Sistemas de Gestión de la Energía (PRONASGEn). Este programa, coordinado por la CONUEE, promueve la aplicación de sistemas de gestión de la energía basados en la norma ISO-50001 y apoya a usuarios de energía con información, asesoría y herramientas de análisis para su adecuada instrumentación en las instalaciones y empresas.

viii) Programa de Ahorro y Eficiencia Energética Empresarial (PAEEEM), también denominado “Eco-Crédito Empresarial”. Este es operado por el FIDE con recursos del FOTEASE. El proyecto pretende otorgar un financiamiento a tasa preferencial a los usuarios con tarifas 2 y 3, con el objetivo de aumentar de su competitividad mediante la reducción de sus costos de operación a través del ahorro y uso eficiente de la energía. En su mayoría el universo de beneficiarios son MiPyMEs que desean sustituir equipos eléctricos ineficientes por equipos eficientes o empresas que desean adquirir equipos nuevos que cumplan las NOM-ENER y también con el sello FIDE. Las tecnologías participantes en el proyecto son refrigeradores comerciales, motores eléctricos, aire acondicionado, iluminación eficiente y subestaciones eléctricas.

ix) Programa de horario de verano. El horario de verano se implementó en México a partir de 1996, basado en la promulgación de un decreto presidencial; cinco años más tarde el Congreso de la Unión aprobó la Ley del Sistema Horario en los Estados Unidos Mexicanos que se publicó en el DOF el 29 de diciembre de 2001. Finalmente, el 1 de marzo de 2002 fue publicado el decreto por el que se establece el horario estacional (horario de verano de siete meses) que se aplica cada año.

x) Programa de ahorro de energía en la Administración Pública Federal. En 1999 se estableció que la Comisión Nacional para el Ahorro de la Energía (CONAE, antecesora de la CONUEE) expediría los lineamientos generales del Programa de Ahorro de Energía en Inmuebles de la Administración Pública Federal. Después de modificaciones de estructura, de 2013 a la fecha este programa se continúa implementando a través de disposiciones administrativas oficiales que todas las dependencias y entidades de la APF deben cumplir. El impacto y los resultados en ahorro de energía rondan los 18 GWh anuales, 15 millones de litros de combustible/año y el equivalente a 1.7 millones de barriles de petróleo al año.

Nota.

Información proporcionada por la CONUEE; presentada en el documento citado en la fuente, el cual se realizó en el marco del programa regional “Base de Indicadores de Eficiencia Energética” (BIEE), iniciativa impulsada por la CEPAL que ha contado con apoyo de la Agencia Alemana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (GIZ) y la Agencia Francesa de Medio Ambiente y Gestión de la Energía (ADEME).

Fuente

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), «Informe nacional de monitoreo de la eficiencia energética de México, 2018», Naciones Unidas, México, 2018.