Introducción
El impacto ambiental es definido jurídicamente como la modificación del ambiente ocasionada por la acción del hombre o de la naturaleza. Aunque este concepto no excluye las alteraciones ambientales que causan fenómenos naturales tales como terremotos y huracanes y que en ocasiones un solo evento de ellos puede ser más determinante en la modificación del medio, los instrumentos de gestión desarrollados para la evaluación atacan fundamentalmente las actividades humanas ya que son el elemento principal, incluso para un mayor alcance en los efectos de aquellos, en el desarrollo de desequilibrios ecológicos. En este contexto se inscribe la formulación de políticas, cuyo objetivo es la consecución de un modelo de desarrollo sustentable en el que se haga un uso racional de los recursos renovables y no renovables y se conserven los elementos del medio ambiente conforme a parámetros que no signifiquen daños a los sistemas o a la salud humana.
Las evaluaciones de impacto ambiental son estudios realizados para identificar, predecir y prevenir las consecuencias o efectos ambientales que determinadas acciones, planes, programas o proyectos pueden causar a la salud, el bienestar humano y el entorno natural. Esta herramienta es de aplicación específica y requiere analizar las particularidades de cada caso, ejerciendo una regulación en distintos planos y etapas. Es un instrumento ideal para la regulación ambiental de proyectos y actividades caracterizadas por su bajo número y alta singularidad, magnitud considerable y especificidad regional, sectorial o tecnológica.
La Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental proporciona la información que se genera en el cumplimiento de la obligación de las empresas de dar cuenta del impacto que las actividades que pretenden desarrollar infringen al medio.