Logros de México ante el Protocolo de Montreal

La implementación del Protocolo de Montreal en México ha significado el desarrollo de más de 115 proyectos de inversión en los sectores de refrigeración, aire acondicionado, espuma de poliuretano, extintores de fuego, aerosoles técnicos y medicinales, solventes y agentes de proceso, fumigantes, así como proyectos de fortalecimiento institucional, capacitación y asistencia técnica. El desarrollo de tales proyectos ha contado con el apoyo del Fondo Multilateral para la Implementación del Protocolo de Montreal por un total de 124 millones de dólares desde 1991 hasta 2015.

A través de estos proyectos se ha eliminado el 98% del consumo registrado en el año 1989, y este último 2% de sustancias agotadoras de la capa de ozono están ya siendo eliminadas a través del Plan de Eliminación de HCFC, las cuales son las únicas sustancias que se consumen en la actualidad en México.

Plan Nacional de Eliminación de Clorofluorocarbonos.

En México se eliminó al 100% el consumo de Clorofluorocarbonos (CFC) desde el 1 de enero de 2010 debido a que, los productos en aerosol distribuidos en el país utilizan propelentes alternativos desde 1990 y, a partir de 1997, todos los refrigeradores domésticos y comerciales producidos localmente se encuentran libres de CFC.

Desde 2005 se eliminó en México el uso de CFC en los sectores de solventes y espumas de poliuretano. En ese mismo año, cinco antes de lo establecido en el Protocolo de Montreal, cerró de manera definitiva la producción de CFC, cuya planta era la más grande de América Latina, por ello se logró una reducción del 12% en la producción mundial y del 60% en la producción continental.

Los logros alcanzados en el «Plan Nacional de Eliminación de CFC» en el sector de servicios son:

  • Equipamiento de 24 escuelas de educación pública para llevar a cabo la capacitación de técnicos a nivel nacional en Buenas Prácticas de Refrigeración.

  • 110 profesores de las 24 escuelas se capacitaron como “Instructores en Buenas Prácticas en Sistemas de Refrigeración y Aire Acondicionado.”

  • Desde 2006 a la fecha se han impartido más de 360 cursos y se han capacitado alrededor de 8,000 técnicos, de los cuales, a 2,100 de los más destacados se les entregó equipos y herramientas para aplicar las buenas prácticas.

  • Asimismo, se estableció la base de datos de técnicos capacitados la cual incluye los datos de los técnicos que han acreditado el curso. Los datos de los técnicos se pueden consultar en la página: http://sissao.semarnat.gob.mx

  • Por otra parte, se estableció una red de centros de reciclado de refrigerantes (CRR) que operan en el país, ubicados en 8 ciudades estratégicas por su alto consumo de dichos gases. Los 8 CRR han recibido desde 2008 a la fecha alrededor de 376 toneladas de gases refrigerantes (clorofluorocarbonos, hidroclorofluorocarbonos e hidrofluorocarbonos), con lo que ha coadyuvado a evitar la emisión de alrededor de 1.1 mega toneladas de CO2 equivalente.

En este contexto, en 2009 se inició el desarrollo de las nuevas formulaciones de Inhaladores de Dosis Medida sin CFC (MDI por sus siglas en inglés), para dar atención al mercado nacional, a la fecha ya están instalados los nuevos equipos para la producción de MDI y los nuevos medicamentos ya están registrados por la Secretaría de Salud, con lo que el Proyecto de eliminación de CFC en el sector de inhaladores de dosis medida se finalizó exitosamente.

Banco Nacional de Halones

Los halones son sustancias utilizadas en sistemas de extinción de fuego, son altamente eficientes, sin embargo su daño a la capa de ozono es muy alto, por lo que en México se decidió crear un Banco que permita captar los halones que no se utilicen en sistemas ya retirados por sustancias y tecnologías alternativas, y que permitan tener un inventario de esta sustancia para aquellos usos que aún persistan y que sean estratégicos y no exista una alternativa viable.

A la fecha, este Banco Nacional de Halones se encuentra en San Juan del Río, Qro., y cuenta con la infraestructura necesaria para dar servicio a todo público, tanto empresas como particulares

Proyecto de eliminación del consumo de bromuro de metilo en México.

En el año 2014 se finalizó el Plan de eliminación del consumo de bromuro de metilo en México, a través del cual se sustituyó el uso de 1,884 toneladas de dicha sustancia por diversas alternativas como el manejo integrado de plagas, biofumigación y solarización, injerto de cultivos y aplicación de algunas alternativas químicas. Asimismo, para la fumigación de espacios y almacenes de alimentos se impulsaron alternativas como la aplicación de calor y otras alternativas químicas.

A través de los proyectos implementados con dicho Plan, los productores agrícolas recibieron asesoría técnica, capacitación, equipos y materiales en donación para la eliminación definitiva del uso de bromuro de metilo en la fumigación de suelos agrícolas, así como en el almacenaje de alimentos.

Proyecto de eliminación de Tetracloruro de Carbono como agente de proceso.

En febrero de 2009 se llevó a cabo un taller sobre alternativas al tetracloruro de carbono y otros solventes agotadores de la capa de ozono en aplicaciones de laboratorio y analíticas, a través del cual se dieron a conocer las técnicas disponibles en el mercado para evitar o disminuir en lo posible el uso de estas sustancias en dichas aplicaciones.

Por otra parte, en el año 2010 se inauguró el sistema de condensación en dos etapas de cloro y absorción de cloro remanente en hidróxido de sodio para evitar el uso de tetracloruro de carbono como agente de proceso, y con ello se eliminó totalmente el uso de dicha sustancia como agente de proceso.

Proyecto de Destrucción de Sustancias que Agotan la capa de Ozono (SAO)

Este proyecto aprobado en marzo de 2011 tiene el objetivo de destruir 166 toneladas de SAO acumuladas en México que están en desuso, y que se están acumulando en centros de recuperación y reciclado.

La primera fase de este proyecto se realizó con éxito a finales del año 2015, destruyendo 74 toneladas de SAO a través de la tecnología de arco de plasma, esta acción significó la eliminación de 520 mil toneladas de CO2.

La segunda y última fase de este proyecto se realizará en el año 2016 y se estima que se destruyan más de 65 toneladas de SAO acopiadas, lo que significará la eliminación de más de 450 mil toneladas de CO2 equivalente.

Plan de Manejo para la Eliminación de Hidroclorofluorocarbonos (HPMP: HCFC Phase-out Management Plan)

En 2011 se aprobó el Plan de eliminación de HCFC en su primera etapa el cual consideró la eliminación de HCFC en los sectores de Espumas, Refrigeración Comercial y en servicios de limpieza de equipos, lo cual incluye actividades de capacitación a técnicos además de fortalecimiento a sistemas de cuotas y licencias de importación y capacitación a oficiales de aduanas.

Asimismo a finales del año 2014, el Comité Ejecutivo del Protocolo de Montreal aprobó la segunda etapa del Plan de eliminación de HCFC, el cual consideró adicionalmente la eliminación de HCFC en el sector de Aerosoles y Solventes, continuar con la capacitación a técnicos en buenas prácticas de mantenimiento de equipos de aire acondicionado y refrigeración, desarrollo de estándares para el uso de hidrocarburos como refrigerantes y continuar la capacitación a agentes de aduanas para la prevención del tráfico ilícito de SAO.

Con este Plan, México debe eliminar el 35% de su consumo de HCFC en el año 2018, sobre la línea base de 1,148 toneladas potenciales, el 50% en el año 2020 y el 67.5% en 2022; sin embargo, en el año 2015 se registró una reducción del 42% del consumo de HCFC, lo cual coloca al país con un cumplimiento adelantado al programa previsto.

A la fecha, ya se han realizado cursos de capacitación a oficiales de aduanas en materia de detección a través de identificadores de gases refrigerantes; se publicó el nuevo manual de mantenimiento a equipos de refrigeración para que a través de un programa de capacitación se entrene a los técnicos en refrigeración para evitar el uso de HCFC como agente de limpieza en el mantenimiento de dichos equipos y el uso de refrigerantes alternativos. Actualmente han realizado 65 cursos a través de los cuales se han capacitado a 1,264 técnicos.

A finales de 2016 estará convertida la planta de producción de espumas de poliuretano al 100%, así como la industria de la refrigeración comercial y la de fabricación de aerosoles. Durante el año 2017 se finalizará el consumo de HCFC en el sector solventes y se iniciarán las pruebas de hidrocarburos como refrigerante para poder establecer los estándares para el uso de dichos materiales.

 

 

 

Fuente: Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Subsecretaría de Gestión para la Protección Ambiental, Unidad Protectora de la Capa de Ozono. Marzo 2016.